BOGOTÁ, Co. * 11 de junio 2025
) Reuters / Agencias / DW
Pese al estado crítico en que continúa, el precandidato a la Presidencia de Colombia, Miguel Uribe Turbay, empieza a mostrar leves signos de mejoría, informó este miércoles el hospital Fundación Santa Fe de Bogotá, donde permanece recluido. El político de 39 años se debate entre la vida y la muerte tras ser víctima de un atentado en el que un joven de 15 años le propinó tres disparos. Varios congresistas y precandidatos convocaron a la denominada marcha del silencio, para el próximo domingo 15 de junio, para protestar contra ese ataque, mientras crece una nueva ola de violencia en el país.

Esperanza de un milagro

El senador de la oposición y precandidato a la Presidencia de Colombia, Miguel Uribe Turbay, permanece en cuidados intensivos tras recibir tres disparos el pasado sábado 7 de junio, pero ha mostrado signos de “mejoría neurológica”, informó este miércoles 11 de junio el hospital donde se encuentra internado.

“En medio de la severidad de su condición clínica existen indicios de mejoría neurológica dada por una disminución en el edema cerebral. Asimismo, se evidencia tendencia hacia la estabilización hemodinámica”, indica un comunicado del centro médico, Fundación Santa Fe de Bogotá.

El hospital agregó que Uribe Turbay permanece bajo estricta vigilancia neurológica y recibe el apoyo necesario en la UCI.

Uribe, de 39 años y potencial candidato para ocupar la Casa de Nariño, es miembro del partido opositor de derecha Centro Democrático. Recibió dos disparos en la cabeza y otro en una pierna mientras participaba en un acto de campaña en un parque público de la capital colombiana.

En los últimos días, el tiroteo de Uribe y una serie de atentados con bombas en el suroeste del país han conmocionado a los colombianos, evocando décadas de miedo y violencia causadas por guerrillas armadas, grupos paramilitares y narcotraficantes.

El presidente izquierdista Gustavo Petro, quien ha prometido pacificar el conflicto del país, encontró en Uribe Turbay un firme crítico de su estrategia de seguridad destinada a poner fin a seis décadas de conflicto armado.

El senador argumentó que la estrategia de Petro de suspender las ofensivas contra los grupos armados mientras las conversaciones de paz habían fracasado ha sido contraproducente.

«Miles de colombianos sufren actualmente las terribles circunstancias y consecuencias de la guerra», declaró la esposa de Uribe, María Claudia Tarazona, a la prensa a las afueras del hospital, mientras hacía un llamado a la paz.

«Miguel está donde está ahora porque luchaba por la unidad y la sanación de un país en guerra», añadió.

Mientras el joven político continúa luchando por su vida, varios congresistas y precandidatos a la presidencia convocaron a la denominada marcha del silencio para el próximo domingo 15 de junio, en repudio al atentado contra Uribe Turbay, mientras crece una nueva ola de violencia en el país.

¿Cómo va la investigación del atentado?

Miguel Uribe se ha estado debatiendo entre la vida y la muerte luego de que un joven de 15 años le propinara tres disparos, dos de ellos en la cabeza.

Pese a las imágenes captadas en video por parte de testigos en las que se ve al agresor adentrarse entre la multitud que escuchaba al precandidato presidencial en un parque de Bogotá para posteriormente empuñar el arma y detonar los disparos, el martes 10 de junio el joven se declaró inocente de los cargos de los que es acusado.

La Fiscalía lo imputó de homicidio en grado de tentativa y porte ilegal de armas.

Pero el menor permanece bajo custodia policial en un centro médico de la capital colombiana tras resultar herido en una pierna durante un intercambio de disparos con el aparato de seguridad del senador, desatado tras el ataque.

Esta semana la fiscal general del país, Luz Adriana Camargo, informó en una rueda de prensa que las autoridades han desplegado un sistema de protección para el agresor y su familia. El implicado fue incorporado al Programa de Protección de Víctimas, Testigos e Intermitentes, para resguardar tanto su integridad como la de su familia, subrayando la minoría de edad del atacante.

Una decisión que reaviva aún más los cuestionamientos hacia el Gobierno y la legislación colombiana y amplía las divisiones políticas. La también senadora de la oposición y precandidata al Ejecutivo, María Fernanda Cabal, fue una de las figuras que arremetió contra la medida. “Esta es la perversión del sistema”, sostuvo.

La polarización aumenta luego de que se conociera que el atentado contra Uribe Turbay podría haberse evitado. Y es que el pasado 9 de junio la familia del precandidato entabló una demanda contra el director de la Unidad Nacional de Protección, Augusto Rodríguez, por “omisión”, debido a que, asegura, el senador se le negaron en una veintena de ocasiones sus solicitudes para reforzar su seguridad.

“En 2023, la UNP había catalogado al senador con riesgo extraordinario, pero en 2024 no tuvo en cuenta que desde octubre ya era candidato a la presidencia y, por lo tanto, se le debían mejorar sus condiciones de seguridad”, remarcó el abogado de la familia, Víctor Mosquera.

Como si fuera poco, el lunes 9 de junio el presidente Gustavo Petro aseguró que el dispositivo de seguridad del aspirante a la Casa de Nariño «fue disminuido extrañamente» antes del ataque. Uribe Turbay contaba con siete escoltas, pero el día de los hechos cuatro de ellos estaban de descanso.

¿Quién está detrás del ataque contra Uribe Turbay?

El ente acusador sostiene que continúan las investigaciones para tratar de esclarecer quién o quiénes están detrás del intento de asesinato que sigue conmocionando al país y reabre viejas heridas de la época de la violencia más sombría entre la década de 1980 y 1990.

Según señaló la fiscal Luz Adriana Camargo, el pasado lunes, las autoridades estudian tres hipótesis sobre los motivos de la agresión: un golpe a la oposición, un intento de desestabilizar al país y una respuesta de los grupos armados ilegales. La funcionaria, sin embargo, declinó dar mayor peso a alguno de los indicios.

Por su parte, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, aseveró el domingo que buscan determinar si el ataque responde o no a la figura política de Uribe Turbay, un conservador que pertenece al partido opositor Centro Democrático y es crítico del actual Gobierno de izquierda. Coincidió en que averiguan si se trata de “desestabilizar” a la Administración actual.

Las autoridades aseguran que han recolectado 1.000 videos que están analizando con ayuda de programas de reconocimiento facial y que incluyen el recorrido que hizo el agresor desde que salió de su casa hasta que acudió al mitin. También allanaron su vivienda buscando pruebas.

Los investigadores han realizado más de 20 entrevistas con personas que participaban en el mitin, pero no han capturado a ningún otro sospechoso. Las autoridades ofrecen una recompensa de 3.000 millones de pesos colombianos, equivalentes a alrededor de 720.000 dólares, por información que conduzca a los autores intelectuales del atentado.

Esta no es la primera vez que la familia de Uribe Turbay vive en carne propia la violencia en Colombia. El senador y nieto del expresidente del país, Julio César Turbay, es hijo de la reconocida y fallecida periodista Diana Turbay, quien fue secuestrada por un grupo de narcotraficantes en 1991, cuando el ahora precandidato era un niño. La reportera murió tras cinco meses en cautiverio en medio de un infructuoso rescate. Un hecho que, según declaró el legislador en varias oportunidades, marcó su vida y carrera política.

) acapulcopress.com